Ahogamiento por sumersión
El ahogamiento por sumersión es una forma de paro respiratorio mecánico, que se produce por la llegada de agua a las vías respiratorias superiores y a los pulmones. La causa de muerte por ahogamiento en agua es la interrupción del intercambio de gases entre el cuerpo humano y el aire exterior Una persona que se está ahogando suele hacer movimientos bruscos, descoordinados y de pánico durante un tiempo, tratando de permanecer en la superficie del agua. Si no se le brinda ayuda a tiempo, el agua ingresa a las vías respiratorias y, debido a su dificultad para respirar, desaparece bajo el agua, «descendiendo gradualmente hasta el fondo».
Primeros auxilios:
En todas las formas de ahogamiento en agua, la respiración se detiene primero. Al ahogarse en agua helada, puede tomar de 30 a 45 minutos restaurar las funciones vitales. Se inician maniobras de RCP hasta que la persona recupere los 35o de temperatura corporal. La premisa básica para el éxito de los procedimientos de reanimación durante un ahogamiento es rescatar la víctima con los procedimientos adecuados de inmovilización, secarla y/o abrigarla e iniciar maniobras de reanimación.
En este caso las maniobras se inician con 5 ventilaciones de rescate y luego se continúan 30/2.